Los fiscales Francisco Cabrera y Diego Arzamendia encabezan el procedimiento de apertura de un contenedor de la empresa International Auto Supply (IAS), perteneciente al ciudadano argentino Diego Dirisio, actualmente prófugo por tráfico internacional de armas.
El contenedor en cuestión se encuentra situado en sede de la Dirección de Material Bélico (DIMABEL), debidamente lacrado a efectos de la investigación en curso.
Dicha diligencia se efectúa con acompañamiento de personal militar y de la Secretaría Nacional Antidrogas, con el objetivo de detallar el inventario de armas guardadas en dicho contenedor y la correspondencia de datos como marca, serie, entre otros.
La investigación realizada por la Policía Federal del Brasil recoge extractos de conversaciones en los que Dirisio coordina con Paulo Fines, lo que se presume es el pago a funcionarios de la Dirección de Material Bélico (DIMABEL), como parte de las acciones para el tráfico de armas.
Una de ellas data del 13 de diciembre de 2019: Paulo Fines le remite a Diego Dirisio una captura de pantalla de conversación presumiblemente entre Paulo y una persona identificada como «CÉSPED DIMABEL 2», este último sería funcionario de la DIMABEL donde se observa que le solicita que le pueda cargar en el sistema de la DIMABEL las comercializaciones o ventas que habría realizado Eliane Marengo y una vez que esté hecha la carga en el sistema, le estaría enviando por giro o su secretario dinero presumiblemente por haber agilizado dicho trámite.
21 de diciembre de 2019: Diego envía una captura de pantalla a Paulo, relacionada a una publicación en prensa digital que tiene el título de «pese a prohibición Dirección de Material Bélico (DIMABEL) estaría otorgando permiso para importar armas».
Seguidamente Diego le menciona a Paulo, que habló mucho con el General y que 1.200 más (presumiblemente refiriéndose a cantidad de armas que estarían importando) y que van a ocupar los 3 permisos de EGV (Probablemente refiriéndose a permisos de importación de dicha empresa) y que de esta manera le estaría teniendo ventaja sobre otras empresas importadoras de armas, (presumiblemente refiriéndose a otros importadores de armas).
Precisamente a raíz de dicha investigación se detuvo a tres jefes militares, entre ellos el excomandante de la Fuerza Aérea, que según los investigadores cumplía la función de proveer de contactos políticos y favores a la organización. Durante el allanamiento a su domicilio, se incautaron: 200 millones de guaraníes,15.100 dólares y 1 Fusil de la marca LUVO modelo LA15, calibre .223. Otros militares más fueron también detenidos.