11/12/2023

Este viernes debe iniciar el juicio al comisario Cristino Aranda y policías involucrados en una red de narcotráfico

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Mañana debe iniciar tras varias suspensiones el juicio a los 14 acusados por los supuestos hechos punibles de tráfico internacional de drogas, comercialización, posesión, extorsión agravada y asociación criminal en el marco de la investigación por el Operativo Espada. El operativo terminó con la incautación de más de 300 kilos de cocaína.

La fiscal Lorena Ledesma presentó acusación en el marco de la causa nº 3971/2019 caratulada “Ramón Giménez Velazquez y otros s/ Tráfico de Drogas y otros”, contra  un grupo criminal dedicado al transporte de sustancias estupefacientes (cocaína) desde Bolivia, vía aérea, hasta la República del Paraguay, específicamente hasta el Departamento de San Pedro, donde volvían trasladar a diversos puntos, y a países extranjeros. Así también contra oficiales que exigieron la suma de cien mil dólares americanos, a cambio de liberar la carga de droga, a los supuestos narcos si no cumplían las exigencias.

Los acusados son Ramon Giménez Velázquez (52), Amado Pérez Mareco (47) agricultor, Luis Darío Candia, de nacionalidad boliviana, (28) estudiante de aviación, Celso Benítez Fleitas, agricultor, Carlos Escobar Nuñez alias “Rubio” (38) agricultor y Carlos César Ayala Marecos (30) agricultor.

Los agentes Cristino Ramón Aranda (53) Comisario General Inspector de la Policía Nacional (padre de la fallecida Cristina “Vita” Aranda); Edgar Diosnel Sosa Melgarejo (30) Oficial 1° de la Policía; Juan José Benítez Achucarro, (32) Suboficial 1° del Grupo Especial de Operaciones GEO de San Pedro.

La lista sigue con José David Alonzo Salinas (39) Sub Oficial Mayor de la Policía, Pablo Cabrera Escobar, (44) Suboficial Principal; Víctor Daniel Dávalos Peralta, (36) Suboficial inspector; Antonio Joel Quiñonez, (29) Suboficial 1º; Oscar Federico Valdez (25) Suboficial Inspector; Aldo Miguel Rodríguez Ruiz (32) Oficial 1º PS de la Policía.

Antecedentes

A través de la intercepción de llamadas, el 8 de marzo del 2019, se identificó a un grupo criminal dedicado al transporte de cocaína desde Bolivia, vía aérea, hasta nuestro país, específicamente hasta San Pedro, y desde ahí la volvían a trasladar a diversos puntos, y a países extranjeros.

En fecha 17 de mayo de 2019, a las 7:00 horas aproximadamente, Luis Darío Candia Zelada en su carácter de piloto de la aeronave con matrícula Boliviana CP-3004, introdujo al país desde el Estado Plurinacional de Bolivia, 304 kilogramos con 800 gramos de cocaína distribuidos en 10 paquetes, la cual aterrizó en la localidad de Hugua Guasú, en el inmueble de propiedad de Ramón Giménez Velázquez, quien se encontraba en el lugar junto con Amado Pérez, líder de la organización, Celso Benítez Fleitas y Carlos Escobar Núñez, quienes realizaron la limpieza del predio, y aguardaban en tierra para el traslado de las cargas, y la realización del correspondiente reabastecimiento y guía para el aterrizaje de la aeronave. 

Esto fue corroborado con el allanamiento realizado al lugar y fecha antes mencionados, lugar en el cual se incautó cocaína en la cantidad antes mencionada, la aeronave de la marca Cessna, matrícula boliviana CP-3004, un vehículo de la marca Toyota, modelo Hilux OAD 503, guiado por Ramón Giménez, quien se encontraba acompañado por Amado Pérez, aguardando el descenso de la aeronave para trasladar los paquetes de cocaína a la camioneta mencionada.

Funciones de cada miembro 

Amado Pérez Marecos, líder y financista, encargado de proveer la logística para la realización de las conductas, coordina la adquisición, recepción, el traslado de las sustancias estupefacientes, hasta su destino final, y de la comercialización de las mismas. Al efecto, trasladaban la carga ilícita que llegaba hasta ese sitio hasta una zona en donde otras personas se encargaban de transportarlas hasta su destino final.

A través de dos líneas telefónicas, impartía instrucciones a los demás miembros de la organización, Ramón Giménez Velázquez, Celso Benítez Fleitas, Carlos Escobar Núñez y Oscar Federico Valdez.

Ramón Giménez Velázquez, proveyó el inmueble donde se asentaba la pista clandestina, frecuentemente utilizada para los traslados aéreos de las cargas de cocaína, así como colaboró a ese efecto para el traslado de la carga de cocaína que llegó a la pista clandestina.

Luis Darío Candia Zelada, piloto de la aeronave que se encontró en oportunidad del allanamiento, y encargado del reabastecimiento de la misma, desde Bolivia hasta la localidad de Hugua Guazu. Luego del allanamiento, la justicia boliviana logró identificarlo como miembro de la organización denominada Clan Candia Castedo, junto con miembros de su familia, Mayerling Castedo Molina, tía del piloto, ex funcionaria de la Gobernación del Beni, a Joyce Candia Castedo, su hija y a Darío Candia Castedo. La avioneta habría salido de la hacienda Nueva York, en Moxos, de propiedad de Darío Candía Castedo. 

Celso Benítez Fleitas y Carlos Escobar Nuñez, oficiaron de guías de la aeronave, limpieza de la pista clandestina, así como encargados del reabastecimiento de la aeronave una vez en tierra, para que la misma aterrice en la pista clandestina ubicada en el inmueble de Ramón Giménez Velázquez, así como realizar labores de estibadores de la droga.

Oscar Federico Valdez personal policial, asignado en ese entonces a la Comisaría N° 28 de San Pedro, desde sus funciones, mantenía constante y fluida comunicación con Amado Pérez Mareco. Su función se circunscribía principalmente a montar vigilancia en las adyacencias del lugar donde la organización criminal recibía cargas de cocaína, y alertaba de la presencia de personas extrañas en la zona, así como de eventuales operativos a realizarse por órganos del estado. En fecha 17 de mayo le cupo la tarea de alertar la presencia de personas extrañas en la zona, mientras se efectuaba el aterrizaje de la aeronave con matrícula CP-3004 que traía 304,800 kilogramos de cocaína.

El mismo se comunicó con Amado Pérez Mareco, para informarle que iban a tener una recepción de sustancias estupefacientes, y le solicitó la realización de un recorrido a fin de asegurar la zona, a lo que Oscar Valdez en una comunicación de las 6:33 horas, le respondió que estaba todo tranquilo.

El 17 de mayo de 2019 en horas de la mañana, una vez que descendió la aeronave para entregar la carga de cocaína en la pista clandestina ubicada en la localidad de Hugua Guasu de propiedad de Ramón Giménez Velázquez, un grupo de personas armadas y vestidas con uniformes de operaciones camuflados, compuesto por seis oficiales de policía y un particular Carlos César Ayala Marecos; el Oficial 1º Edgar Diosnel Sosa Melgarejo; Juan José Benítez Achucarro; Sub Oficial Mayor José David Alonso Salinas; Sub oficial Principal Pablo Cabrera Escobar; Sub oficial Inspector Víctor Daniel Dávalos Peralta; Sub Oficial 1º Antonio Joel Quiñonez, ingresaron al lugar, dispararon a la aeronave, así como también redujeron a Ramon Giménez Velázquez, Amado Pérez Marecos; Luis Darío Candia Zelada, Celso Benítez Fleitas y a Carlos Escobar Nuñez, y exigieron la suma de cien mil dólares americanos, a cambio de liberar la carga de droga, amenazando con matarlos y sustraer la sustancia estupefaciente si no cumplían las exigencias.

En el momento en que ingresó la comitiva de la SENAD para la ejecución del allanamiento que se ha mencionado anteriormente, con el acompañamiento del Ministerio Público, y al escuchar la orden de “alto”, los oficiales de policía y el particular, efectuaron varios disparos contra los agentes de la SENAD, a fin de impedir el cumplimiento de la orden judicial y que se constate la flagrancia de los mismos con la avioneta, la droga y su presencia en el lugar.

Finalmente todas estas personas fueron reducidas por los agentes de la SENAD, identificadas e incautadas varias armas de fuego, algunas propiedad de la Policía Nacional. Este contingente de personal policial no contaba con una orden judicial que los habilite, ni la habilitación o comunicación correspondiente al Ministerio Público.

Desde el 8 de mayo de 2019, Cristino Aranda, Director de Policía de San Pedro, fue quien organizó al grupo y encomendó la dirección del operativo a Edgar Diosnel Sosa, quien proveyó los datos de inteligencia, y en fecha 17 de mayo de 2019 intentó justificar la presencia del personal policial en el lugar, a través del informe Nº 1273 de dicha fecha, así como se habría comunicado con el Agente Fiscal Especializado en La Lucha contra el Narcotráfico de la zona, Abg. Jorge Encina, a fin de legitimar el ingreso, informó coordenadas de un lugar que se encontraba alejado del inmueble de propiedad de Ramón Giménez Velazquez.

Edgar Diosnel Sosa, oficial primero, fue quien dirigió la operación, brindó los datos del lugar, asignado en ese entonces al Centro de Recolección de Informaciones de la Policía Nacional, quien se encontraba en ese entonces de permiso desde el día 2 de mayo de 2019, José David Alonzo Salinas, cumplía funciones en la Comisaría 18° de Santa Rosa del Aguaray, Pablo Cabrera Escobar era Sub Jefe del Grupo de Operaciones especiales GEO del Departamento de San Pedro y Juan José Benítez Achucarro prestaba servicios en dicha dependencia; Antonio Joel Quiñonez cumplía funciones en el sistema 911 de Concepción y Víctor Daniel Davalos Peralta prestaba servicios en el Puesto Policial de Santa Rosa del Aguaray.

Estas personas, Edgar Diosnel Sosa, José David Alonzo, Pablo Cabrera Escobar, Juan José Benítez Achucarro, Antonio Joel Quiñonez, Víctor Daniel Dávalos Peralta y Carlos César Ayala Marecos, quien era un particular, ingresaron armados y equipados al predio de propiedad de Ramón Giménez Velázquez desde las 00:00 horas aproximadamente del 15 de mayo de 2019, armaron un campamento en el lugar y aguardaron el arribo de la aeronave hasta el día 17 de mayo de 2019 a las 7:00 horas de la mañana, momento en el cual descendió la avioneta a la pista clandestina y los mismos exigieron la suma de dinero a Amado Pérez, Ramón Giménez, Luis Darío Candia Zelada, Celso Benítez Fleitas y Carlos Escobar, y fue frustrado su cometido por la comitiva de la SENAD y del Ministerio Público que ingresó en ese momento al lugar para la ejecución del allanamiento.

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