20/05/2024

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Fiscalía asegura que licitación fue amañada, confirma daño de G 306 millones y pide 4 años de cárcel para Patricia Samudio

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Los fiscales Silvio Corbeta, Francisco Cabrera y Luz Guerrero pidieron una pena de 4 de cárcel a Patricia Samudio, extitular de Petropar y 3 años 9 meses de cárcel para su esposo, José Costa, por el caso “agua tónica”. Para la fiscalía quedó probado que se amañó una licitación por la vía de la excepción para pagar un crédito contraído por la pareja de Samudio. 

En sus alegatos finales, el fiscal Silvio Corbeta comentó que informes de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) y de la Contraloría indican que no se ha justificado el llamado a licitación en pandemia para que sea utilizada la vía de la excepción. 

“El 19 de marzo de 2020, por Resolución Nº 190 se adjudica a Solumedic, la única empresa oferente que se presentó y que llamativamente sus propietarios tenían un vínculo de amistad con la Samudio, titular de Petropar en ese entonces, y su esposo. Ese mismo día de la adjudicación, a una velocidad exponencial, se suscribe el contrato con la empresa, con Liz Adolfina Chamorro, por G 359.700.000 por pallets, agua tónica, tanques, bidones, entre otros, que la Contraloría y la DNCP estimaron que no eran urgentes y que podían ser adquiridas por procedimiento ordinario y por por la vía de la excepción”, relató Corbeta. 

En ese sentido, aseguró que Samudio, en su calidad de ordenadora de gastos, autorizó el desembolso por la suma mencionada en el marco; de acuerdo a lo corroborado, la empresa Solumedic no se encargaba de la provisión de estos rubros, sino más bien insumos y equipos médicos. 

Recordó que el perjuicio patrimonial fue cometido con ayuda de los funcionarios que en ese momento estaban bajo su dirección, quienes fueron beneficiados con salidas alternativas y en sus procesos han reconocido su participación y admitido los hechos atribuidos, lo que demuestra que el ilícito sí existió.  

“Casi la totalidad de las mercaderías no fueron entregadas por Solumedic. En la extracción de los datos de los celulares se comprueba la participación de José Costa Perdomo, una persona que no tenía ninguna vinculación con Petropar, sin embargo él, días antes contacta con el señor Víctor Cabañas (de Solumedic), con quien tenía una relación de amistad, para que esta empresa se presente a la licitación (…) Se puede ver claramente que esta licitación fue direccionada hacia la adjudicación”, destacó Corbeta. 

Las únicas mercaderías entregadas fueron los mamelucos descartables, acotó. 

Igualmente quedó acreditado – prosiguió Corbeta – que no solamente se causó un daño patrimonial, de aproximadamente G 346.600.000, el dinero lo transfirió por instrucciones de su esposo. El dinero, sin embargo, fue transferido a otra cuenta, no a la de Solumedic, por pedido de Cabañas (siguiendo instrucciones e Costa Perdomo), sino a nombre de la empresa Racole S.A. destinado a saldar un préstamo contraído por José Costa Perdomo días antes del llamado. 

“El señor José Costa Perdomo, evidentemente, por su relación sentimental con Patricia Samudio, ya conocía de antemano que Petropar convocaría a una licitación y justamente realiza una crédito”, dijo y agregó que en ese contexto es él quien realiza la coordinación con Solumedic para la supuesta provisión de las mercaderías. “Básicamente la participación de Solumedic fue la de prestar su esquema empresarial a los efectos de participar en esta licitación y legitimar la salida de dinero”.

Es decir, el dinero de la institución fue a parar en beneficio de provecho económico de ambas personas, porque fue a saldar un crédito, ratificó. 

El señor Víctor Cabañas y Costa Perdomo, en la urgencia de tratar de cubrir la ausencia de contraprestación, un mes después de la entrega suscrita del dinero, empiezan a comprar en realidad las mercaderías.  “Es decir, estas entregas nunca se dieron en realidad”.

Respecto al agua tónica, si bien la señora Samudio ha mencionado que fue producto de una donación, esto es totalmente falso debido a que el MP descubrió por medio de un allanamiento a la planta de Villa Elisa de Petropar, donde pudo apuntar el número de lote, permitiendo describir así el origen real de la mercadería, que fue adquirido por un secretario de José Costa Perdomo, de nombre Sergio López. 

El juzgamiento prosigue este martes y se podría dar a conocer la sentencia de este caso.

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