El Centro de Atención a Víctimas del Ministerio Público, de enero a octubre de este año asistió a más de 11 mil personas que sufrieron diversos hechos punibles. De la cifra señalada, casi 3.000 son casos de abuso sexual en niños. Se dieron 4.786 intervenciones psicológicas por causas de violencia familiar. El CAV cuenta con un equipo de 73 sicólogos y 21 trabajadores sociales para todo el país, lo cual obliga a que los profesionales recorran grandes distancias. Por ejemplo, 5 sicólogas de Asunción, cada dos meses tienen que viajar cada dos meses a Pozo Colorado, Filadelfia, Carmelo Peralta, Santa Rosa del Aguaray, Salto del Guairá, etc.. El Observador habló con la directora, la licenciada Sady Pavetti, sobre el trabajo y las necesidades del Centro.
La cifra de más de 11 mil diligencias del CAV fueron reportadas en el periodo de enero a octubre de 2023, de las cuales 9019 corresponden a atención psicológica y 2159 al área de Trabajo Social, distribuidas a su vez en áreas denominadas Asunción, Zonales y Regionales.
Registro de Víctimas
En cuanto a la cantidad de víctimas tanto directas como indirectas de hechos punibles 10.492 son mujeres y 2.041 hombres, quienes recibieron atención psicológica.
El área de Trabajo Social registra 2.470 víctimas del sexo femenina y 617 del sexo masculino.
En lo que respecta a los hechos punibles, se tienen contabilizadas 2.287 atenciones psicológicas por abuso sexual en niños y 507 intervenciones de Trabajo Social por el mismo tipo penal.
A su vez 4.786 intervenciones psicológicas fueron por causas de violencia familiar y 1.047, fueron abordadas desde la instancia de Trabajo Social.
Un total de 505 atenciones psicológicas fueron efectuadas por coacción sexual y violación y 76 víctimas que recibieron atención del área de Trabajo Social.
Otro dato revelador tiene que ver con la franja etaria de víctimas de hechos punibles reportados en lo que va del presente año, 1.115 víctimas directas se ubican entre los 10 y los 12 años, y 1.347 tienen entre 13 a 15 años.
Funciones de cada área
La Lic Sady Pavetti, directora del CAV explicó que las funciones son bien específicas dependiendo del área que le corresponda cada caso ya se psicología o trabajo social
En lo que respecta al componente psicológico se trata de establecer el estado emocional de la víctima, por medio de 3 a 4 entrevistas, a fin de ver secuelas de un hecho punible y otros puntos de acuerdo a las necesidades de la investigación.
Según la psicóloga esta labor es esencial pues permite comprobar la credibilidad del relato, como también una eventual simulación.
En caso de constatar indicios de un posible trastorno relacionado a la salud mental, como por ejemplo un retraso madurativo puede ser determinante para elevar la pena.
A su vez, las trabajadoras sociales deben determinar cuando el fiscal del caso así lo disponga la evaluación social del daño que le generó el hecho punible a la víctima y en especial si es menor de edad