La doctora Ana Rodríguez, jueza del Tribunal de Sentencia Especializado en Delitos Económicos, afirmó que su compromiso al asumir el cargo es con el país. Refirió, que, durante el ejercicio de la función, a lo mejor van a buscar hacerle “tambalear”, “pero estoy suficientemente preparada para luchar contrala corrupción reinante, sin que me tiemble la mano para firmar una condena ejemplar cuando corresponde”, enfatizó la ex asistente fiscal.
-Estamos con la doctora Ana Rodríguez, ella juró como miembro del Tribunal de Sentencia Especializado en Delitos Económicos.
“Si, nosotros formamos parte del primer Tribunal de Sentencia en Delitos Económicos propiamente dicho, verdad, conformamos con la doctora Adriana Planás Bajac y la doctora Karina González. Nosotros tenemos un compromiso con el país, no solamente con nuestra familia, porque de ahí partimos, sino con el país; de poder luchar contra la corrupción reinante que hoy en día se hizo como una costumbre en nuestro querido Paraguay, que daña bastante la imagen”.
-En esa lucha, ¿cuál es su compromiso desde la administración de justicia?
“Es un compromiso, nosotros íntegramente estamos preparados, venimos con una convicción, con valores y obviamente con la imparcialidad que nos toca como jueces de luchar contra la corrupción reinante. El compromiso es con el país, no tenemos un compromiso con ninguna persona, sino con el país mismo para poder limpiar la imagen que tiene nuestro querido Paraguay, ya que hace poco salió de vuelta que estamos en el puesto C, como uno de los países más corruptos”.
-¿El papel de la justicia dentro de esa lucha como ven ustedes?
“Nosotros cómo vamos a quedar, o sea, cómo es que vamos a luchar contra eso: dictando condenas ejemplares, obviamente siempre valorando las pruebas, conforme a la sana crítica obviamente. Así como puede haber gente, puede haber personas que sean culpables también puede haber personas inocentes. Entonces, a nosotros nos toca valorar las pruebas conforme a la sana crítica”.
-En los hechos de corrupción, siempre están implicados personas con poder económico o con fuerte respaldo político, porque los que están acusados o van a juicio oral, son siempre casi políticos que ocupan cargos muy importantes o exministros o ex fiscal general incluso; entonces no ha de ser fácil juzgar a esa persona por el poder que de repente, puede ser político y puede ser económico
“Bueno, pero ya ahí entra a tallar nuestros valores y la imparcialidad como jueces, ahí entra a tallar la convicción que nosotros tenemos. Nosotros juramos ante Dios y la patria hacer justicia. Nosotros no podemos llevarnos, ni tampoco ser influenciados nada más que porque sean políticos o lo que sea, es una tarea difícil, pero no imposible, porque estamos comprometidos con nuestro país y con la justicia, y limpiar la imagen de nuestro país y del Poder Judicial. El Poder Judicial tiene mucha esperanza en nosotros por eso puso la confianza en nuestras personas. Nosotros somos personas muy preparadas, porque yo tengo 24 años de antigüedad dentro de la función pública. Fui asistente fiscal por muchísimos años y cumplí 24 años de antigüedad. Entonces, estamos comprometidos con la justicia paraguaya, así como mis colegas también”.
-¿Cuál fue su última función antes de ser designada por la Corte?
“Asistente fiscal del Ministerio Público estuve en varias áreas entre los 19 años en el Ministerio Público, por lo tanto, conozco bastante sobre el movimiento de la Justicia, de todo, pero siempre estando detrás del mostrador, cómo se dice, pero es lo que yo vuelvo a recalcar taxativamente es el compromiso que nosotros tenemos. ¿Por qué el compromiso? Porque es el primer tribunal propiamente dicho en Delitos Económicos y nosotros fuimos capacitados para poder ocupar este cargo y fue una elección por concurso”.
-La honestidad y por sobre todo la valentía, yo creo que son dos elementos muy importantes que deben reunir los jueces especializados para que en el momento de condenar a una persona con poder económico o con fuerte injerencia política no le tiemble la mano.
“Por supuesto, pero vengo otra vez a recalcar algo, los valores que manejamos como personas. Los valores que uno trae uno mismo es lo que va a entrar a tallar, por supuesto la honestidad, por supuesto la honestidad, por sobre todas las cosas y la honestidad y la imparcialidad. Valorar las pruebas conforme a la sana crítica, así como dice la ley, entonces estamos comprometidos, y yo sé, puedo hablar por mí, de que yo voy a tratar de hacer el mejor trabajo. Obviamente se van a poner cosas en el camino que a lo mejor me van a hacer un poco tambalear, pero yo creo que estoy suficientemente preparada para poder luchar contra la corrupción reinante sin que me tiemble la mano para firmar una condena ejemplar cuando corresponde”.
