De acuerdo a los primeros reportes, habría al menos dos personas fallecidas como resultado de un enfrentamiento a tiros entre grupos de labriegos por una disputa de tierras en Marina Cué, Canindeyú, misma zona donde hace diez años de haberse registrado la masacre que dejó como saldo 17 muertos, de los cuales 11 eran campesinos y seis policías.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Osmar Benítez y Nemesio Rojas. Una tercera persona, identificada como Gabriel Gauto, resultó herida y fue trasladado a un hospital de la zona.
Aparentemente se trataría de una disputa por una propiedad que forma parte de la Reserva Natural Yvera, entre dos grupos antagónicos de campesinos, uno de ellos liderado por los hermanos Adalberto y Néstor Castro, y el otro encabezado por Marina Paredes y Darío Acosta, quienes se identificaron como integrantes de la Comisión de las víctimas de la masacre de Curuguaty.
