Rodrigo Florencio Pedrozo Agüero, fue acusado por el fiscal Osmar Segovia, como líder de una organización criminal que traficaba marihuana al Brasil y que operaba entre los departamentos de Concepción y Amambay.
La acusación revela cómo operaba la banda, que entre sus integrantes tenía a Diego Pedrozo, funcionario contratado del Ministerio Público de Concepción, y utilizaba el cargo para obtener información privilegiada. Además, era el nexo con las autoridades de la zona, que brindaban protección a los acusados a cambio del pago de millonarias sumas de dinero.
Pedrozo está acusado de encabezar una banda que operaba entre los departamentos de Concepción y Amambay, transportando los cargamentos de droga en camiones desde la zona de producción de la ciudad de Concepción hasta Pedro Juan Caballero, punto desde donde se realizaba el trasbordo de la carga, para atravesar la frontera con destino final a Brasil.
El último cargamento que se le atribuye a esta organización fue incautado y era de 35.390 kilos de marihuana distribuidos en 1.078 paquetes.
Rodrigo Florencio Pedrozo Agüero tenía como hombres de confianza a Walter Duarte y Gustavo Vera, quienes estaban a cargo de prensar y acopiar la droga, además de ocuparse de gastos y pagos a ser realizados por la estructura criminal a fin de que los mismos pudieran transitar con libertad.
Su hermano, Diego Pedrozo, estaba a cargo de dar las indicaciones para el pago a las autoridades de la zona en la que operaba la estructura criminal para que los mismos no interfieran en la producción y traslado de la mercadería, siempre según la acusación.
Este también cumplía con la función de contactar con los hermanos Correla Bizzo (hoy día con orden de captura internacional y estado de rebeldía) quienes financiaban la estructura criminal y suministraban los contactos principales para el envío de la marihuana a Brasil.
